PROGRAMA #247 “Levantamientos populares: Lo que está pendiente – ¿O está empeorando?”

Juntarnos a pensar y a decir lo que nos pasa, sin oportunismos, sin juntarle votos a tal o a cual y dispuestos a la imaginación política popular, puede parecer un gesto ilusorio o imposible que algunos seres intentamos y otras personas, como Manuel Rozental, concretan.

Este activista y militante nacido en Colombia pero fuertemente atravesado por las luchas que se libran abajo y a la izquierda en cualquier rincón del mapa, se tomó el trabajo de transcribir una serie de ponencias propiciadas por la mexicana Cátedra Jorge Alonso y condensó esas voces –entre las que está también la suya- en el libro “Levantamientos populares: Lo que está pendiente – ¿O está empeorando?”.

El documento que pone la lupa en los acontecimientos que se sucedieron en Chile, Colombia y Ecuador y sobre ellos lanza vivencias y reflexiones acerca de las formas y las trampas, los anhelos y sus limitaciones y, siempre, el poder de unas organizaciones que no debieran dejarse atropellar por los fulgores de los espejitos de colores del capital, la jerarquía, la representación y lo institucional.

La edición de este volumen que compila valiosas y valientes reflexiones sobre la acción y las vallas a saltar para burlar la frontera de lo dado y de lo posible, es una iniciativa de Pueblos en Camino, tiene descarga gratuita en su web y convida, además, a que se hagan ediciones en papel cuyos dividendos queden para los grupos que propicien estos debates en nuestros países.

“Nos preparamos, recordamos, cosechamos, nos escuchamos y aportamos tejiendo delante del espejo de la rebeldía que reclama re-conocer-nos ante lo que nos somete, habita y pretende exterminarnos como brutos. Desde rebeldías tejedoras de territorios; hijxs de la Madre Tierra. Entregamos la escucha, los aportes y el tejido. Desafío pendiente: la certeza de la destrucción y muerte. Que la vida deje de ser apenas una posibilidad incierta, una utopía.
Aportamos voces de levantamientos desde los pueblos de la tierra ancestral, hasta encarar tiranías populares y las mafiocracias fascistas en ascenso. Persistencia, extensión y penetración del referente neutro desde conquistadores que hasta aquí y ahora cambian de máscara y disfraz. Referente neutro tan presente como invisible que define y condiciona todo lo posible, bueno, malo; violencia del poder, relaciones sociales, normalidad. Farsa-realidad de estados que surgen y perpetuamos”, puede leerse en el tormentoso prólogo.

La charla con el compañero Manuel –una voz reconocible para quienes hacemos y escuchamos este programa- le pone pasión y foco a estas problemáticas y despliega, además, su propio escrito acerca del rol estatal en un capítulo titulado “La libertad y el estado son incompatibles” y donde firma “Reconocer que vivimos a pesar de los estados y liberarnos”.

Palabras, persistencias, siembras y sueños que compartimos y que Manuel Rozental recrea con alegre rebeldía, con la sonrisa franca que podemos entregar cuando estamos entre pares, entre iguales, entre quienes nos sentimos con deseos de amasar ya mismo el pan del futuro que nos merecemos.

PROGRAMA #246 ¿Por qué viajamos a Andalgalá?

 

Este programa es un fruto; lo era antes porque se gestó reuniendo voluntades dispersas, ideas en llamas, inconformismos varios y así anda, renegando y preguntando; lanzando el verbo como pedradas contra lo dado y conocido; conociendo cada experiencia que se levanta y recogiendo las injusticias de este mundo bestial que se muerde la cola.

Pero esta suma de martes, de noches, de derivas, de tribu’s, tal vez estuvo buscando desesperadamente pasar de las palabras a los hechos y tejer con compas de diversas tradiciones y procedencias la decisión de ponernos en acción por una causa esencial, una pelea que a lo mejor sea la madre de todas las batallas por dar.

Y por eso hoy celebramos anunciar que somos parte de un colectivo que próximamente viajará a Andalgalá a gritar ya basta, a acompañar la digna rabia de las asambleas y las gentes que aguantan el embate del poder que quiere tumbar las montañas, llevarse el agua, pudrir el aire.

Lo hacemos entendiendo que somos apenas un medio, parte de los y las cualquieras que usa la voz y la cabeza para expresar aquello que piensa y siente en torno a la explotación y sus responsables y que a la vez quiere vislumbrar de qué manera nos inventamos un porvenir común.

En ese plano les preguntamos a compas con quienes hacemos esta travesía grupal ¿por qué viajamos a Andalgalá? Como un modo de recrear las respuestas, las razones y los sentires de una actividad que nos está ocupando tiempo, esfuerzo y alegría, que ya tuvo algunas movidas y que aguarda por nuevas citas previas en busca de que todo resulte, de que florezca el encuentro.

Podemos intentar ser muchos, o ser varias o un montón de pocos de momento, pero esta pelea es más vasta y honda, es una disputa por re-conocernos, por construir un nosotras, un nosotros, un nosotres que tenga la forma y la modalidad que se pueda pero que tome nota con certidumbre algunas cosas: que todo artilugio legal o institucional sirve para resistir y ganar tiempo pero que no es por ahí, que ni la justicia ni los poderes del capitalismo patriarcal y colonial van a dar una respuesta y, por tanto y al mismo tiempo, tenemos que compartir de modo horizontal, sin jerarquías ni profesionales del liderazgo.

Ojalá que este gesto sea el primero de muchos tan necesarios y vitales como este inaugural y sigamos andando en busca de abrazos y horizontes, de compañías y quimeras, de anhelos por cumplir sabiendo que quedarán otros por emprenderse porque el enemigo ataca y al reconocerlo hacemos camino al andar en busca del mañana.

PROGRAMA #245 Mujeres Creando

 

A 20 años de su aparición en la escena política boliviana y más allá de la poderosa figura de la comunicadora y escritora paceña María Galindo, la colectiva Mujeres Creando es una experiencia organizativa feminista que, a contrapelo de otras experiencias continentales, se mantiene por fuera de las estructuras estatales y partidarias.

Autodefinida como una formación anarquista, en su seno se combinan las actividades ideológicas, formativas y también productivas lo que le otorga un carácter orgullosamente heterogéneo y autónomo según la presenta Julieta Ortega.

En la casa que la agrupación denomina La Virgen de los Deseos y en charla con la compañera Vanda Ianowski que anduvo militando y conociendo el singular entramado social que habita la Bolivia activa y consciente, nos asomamos a un grupo de los más particulares y potentes del país.

“La marca de origen de Mujeres Creando está en el enfrentamiento con el discurso neoliberal de las ONG’s en torno a la igualdad y también por una fuerte crítica a ‘la izquierda’ boliviana que consideraba a las mujeres ‘como apoyo logístico, como mano de obra gratuita, como botín sexual, como masa que opera las movilizaciones pero que no cuenta’”, se presenta esta asociación de cuño feminista.

En sus dos décadas de caminar, el espacio instauró, además, el Parlamento de Mujeres como un sitio que fue capaz de romper la polarización de posiciones entre la intención del MAS de Evo Morales de perpetuarse en el poder y la asonada golpista que hizo que Jeanine Áñez asumiera la presidencia durante el año que fue de noviembre de 2019 a igual mes de 2020.

Con su Radio Deseo como parlante y difusor y la firme convicción de que, como dice Julieta, “Mujeres Creando no es una personería jurídica, no es una institución sino una construcción simbólica”, esta charla nos permite adentrarnos en una práctica llena de particularidades locales pero capaz de entregar señales posibles para darle cuerpo a la posibilidad de resistir y construir.

Desde estas mujeres y disidencias bolivianas que en un mismo acto destruyen el cuento oficial del estado plurinacional y señalan la honda persistencia patriarcal de la existencia en el mundo capitalista, en Después de la Deriva volvemos a celebrar el enorme aporte de Vanda Ianowski para seguir conociendo ese mundo diverso que pugna por inventarse un mañana.

PROGRAMA #244 Un atentado contra los pueblos

 

El atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner sacudió fuertemente la escena política nacional pero en esa conmoción también brotada de este tiempo de inmediatez con la violencia transmitida en vivo y en directo por múltiples sistemas, fue más allá de la imagen y sus consecuencias.

Tomando prudente distancia de la búsqueda del rédito electoral que también sobrevino al suceso, el intento de asesinato despertó no pocas consideraciones acerca del valor de la vida en democracia, hizo gala del respeto a los derechos humanos y repuso la consigna del “Nunca Más” para remitir a cuestiones que, según se dijo, no están en juego en la sociedad actual.

La ligereza del consignismo, del slogan que se derrama desde bocas febriles define a quién lo dice, caracteriza a quien lo esparce y desnuda poderosamente a un sentido común que ha perdido el raciocinio o la decencia.

En una Argentina tan brutalmente injusta y desigual como cualquier nación capitalista con su ejército de personas hambreadas, hay que anotar rápidamente las desapariciones en democracia, los recurrentes casos de gatillo fácil de las fuerzas represivas, la expansión de las políticas extractivistas con su lastre de zonas de sacrificios y seres privados de territorios, agua y aire para respirar.

Cristina Fernández de Kirchner es parte central y protagónica del elenco gobernante de las últimas dos décadas, un período donde las injusticias, la impunidad y las violaciones a los derechos humanos gozan de excelente salud

¿Acaso alguien en sus cabales puede realmente decir que la pistola gatillada a centímetros de la cabeza de la funcionaria inaugura la violencia política de estos años? ¿Vale más la vida de una líder política que la de cualquier otro mortal? ¿Hacemos bien en depositar expectativas y sueños en la figura de una persona que, bien vale recordarlo, fue dos veces presidenta; tuvo un rol central en el gobierno de su esposo fallecido e integra la actual administración?

No se trata esta noche en Después de la Deriva de relativizar la agresión sino de poner en contexto cómo miramos como sociedad ese hecho y cómo lo hacemos dialogar con otros que forman parte de un cotidiano doloroso y desolador.

Una colección de voces compañeras, de reflexiones de cualquieras como nosotras, como nosotros, nos ayudan a pensar, a despertarnos, nos convidan a la inquietud y al menos, procura detener la frase de ocasión que dice que aquello que es falaz.

Vaya esta colección de palabras y reflexiones como un alerta necesario acerca del mundo que vivimos y no el que nos quieren hacer creer que habitamos porque tal vez de esa certeza aletargada surja la necesaria rabia que nos haga dar cuenta de lo imperioso que resulta hacernos cargo, dejar de ser soldados de las causas de otros y otras y, en cambio, hacer brotar la emancipación.